Después de haber visto tantas películas sobre tiburones, la imagen que tenemos sobre ellos no suele ser muy buena pese a que casi un 90% no atacan a las personas.
El Golfo de Carpentaria en Australia ha sido el lugar escogido por éstos tiburones para hacer acto de presencia y darnos por enterados de que hambre tenían. Fue en un barco de pescadores, notaron ruidos por la parte trasera y cuando se decidieron a mirar qué podía ser, ésta fue su gran sorpresa.
Para evitar males mayores, los pescadores decidieron compartir el botín echándoles a los tiburones de comer. ¡Alucinante!
